Para poder hablar del porqué y del cómo segmentar una base de datos tenemos que tener claro qué es en sí una base de datos. Esta la podríamos definir como un programa donde no solo se recopilan datos si no que también se puede conseguir conectarlos entre sí, con la base de una unidad lógica.
Lo que ocurre en la actualidad, y sobre todo con la aparición de internet, es que tenemos que pasar a hablar de base de datos con una gran cantidad de los mismos. Es decir, nos referimos al término big data. Y cuanto mayor sea esta cantidad de datos, más importante será el hecho de que estén segmentados y organizados para que podamos, de verdad, sacarles un provecho.
Digamos que toda la información que podamos recabar de nuestros compradores o posibles compradores no servirá de nada si esa base de datos no está bien sistematizada porque nos perderemos entre tantos datos en la nube.
Obviamente, sobre todo cuando una empresa está empezando, siempre se puede optar comprar base de datos que, al final, no es otra cosa que contar con la información oportuna para lanzar el mensaje más adecuado, en el momento preciso y a la persona que nos interesa.
¿Empiezas a ver por qué es tan importante? Siendo así, aunque no se puede asegurar al 100% el llegar al cliente y finalizar la venta, que no deja de ser el objetivo de cualquier empresa, desde luego sí que facilita mucho esta labor. Por eso, el conseguir base de datos de clientes será fundamental. Es la mejor manera, de hecho, de entrar en su mente, de saber qué quieren y cuándo. Así la mitad del camino está ya hecha.
¿Qué entendemos por segmentación?
Porque hemos querido aclarar ya del inicio qué es una base de datos, su importancia y hasta podemos ponernos a hablar de la evolución de las bases de datos… pero lo que nos ocupa en este caso es la segmentación de las mismas y del porqué es interesarlo hacerlo para una empresa.
Partamos de una idea muy sencilla. Tenemos que tener claro que en nuestra base de datos nos encontraremos con información de mucho tipo y de diferentes personas y, como es lógico, esto se traducirá en diferentes necesidades. Por esto mismo, no tendría sentido que tratáramos a todas ellas de la misma manera. Es más, podría revelarse contraproducente.
Tenemos que tener claro que el almacén de datos está para usarlo, pero con cabeza. A día de hoy los clientes o potenciales clientes son, cada vez, más exigentes y agradecen una atención personalizada. Incluso esto lleva a una fidelización con la marca.
Además, hay que ver las ventajas competitivas que supone el hecho de segmentar una base de datos. Para empezar, llevará a la empresa a ahorrar en costes porque no creará campañas de marketing para un público que no tenga interés en aquello que se está ofreciendo. Además, como comentábamos, mejorará la reputación de la marca porque se percibirá como una empresa que, de verdad, se preocupa por su público. Y, por último, llevará a optimizar los recursos.
Todo el conjunto de datos que consigamos almacenar nos llevará a tener un sistema de base y, a partir de aquí, con estos tipos de datos podemos crear tipo de bases de datos diferentes: datos orientada a objetos, bases de datos jerárquica, bases de datos estáticas, bases de datos distribuida…
Podremos usar estas bases de datos por diferentes características que tengan los contactos en común, como pueden ser conductuales o demográficas para elaborar una estrategia a medida.
¿Cómo segmentar una base de datos?
Hasta aquí todo perfecto. Tenemos claro qué es una base de datos y también que con todo ese conjunto de datos, mejor segmentar, pero ¿Cómo lo hacemos? Aunque hay diferentes modos de proceder en esto de la gestión de bases, vamos a ver algunos pasos que suelen ser, cuanto menos, recomendables.
- Información relevante. Tenemos que tener claro qué, de todas esas cantidades de datos que tenemos a disposición nos puede interesar a nosotros para ayudarnos con la venta de nuestros productos y servicios.
- Crear categorías. Normalmente no solo nos interesa una información de la base de datos así que aquellas que puedan ser relevantes deberán entrar en diferentes categorías, para que sea más fácil recuperarlas.
- Poner a la prueba. En esto del marketing una buena parte es la de hacer test y ver qué funciona mejor. Con esto de la base de datos no iba a ser diferente. Habrá que ir viendo que formato se adapta mejor a las necesidades.
- Herramienta para el procesamiento de datos. Por suerte, tenemos unas cuantas a disposición en el mercado que nos permiten almacenar todo aquello que necesitemos. Habrá que ver cuál nos encaja más o con la que nos sentimos más cómodos a la hora de trabajar.
- Análisis de datos y resultados. Esto nos llevará siempre a perfeccionar más nuestra base de datos y a quedarnos con aquella información que, de verdad, nos pueda ser útil. Esta, además, puede ser distinta a lo largo del tiempo, algo que también tendremos que tener en cuenta para adaptarnos.
Beneficios de segmentar una base de datos
Algunos los hemos ya mencionado o los hemos dejado entrever, pero es importante que estos se tengan en cuenta a la hora de invertir sobre la base de datos en sí, por supuesto pero también en la gestión de la misma.
- Conocer mejor a los contactos. Hay que tener en cuenta que las empresas que aspiran al éxito y a hacerse con los clientes tienen que dar algo más, ese extra que las hará diferentes de las demás en una marea de negocios como es internet.
- Personalización. Unido al punto anterior, el cliente o posible cliente percibirá las acciones de marketing come pensadas, de verdad, para él y esto le hará sentirse importante, especial con lo que la percepción de la publicidad será distinta y más positiva.
- Experiencia de usuario. Entendiendo cuáles son sus problemas y necesidades podemos mejorar esto lo que llevará a quelas ventas se puedan cerrar más fácilmente y a que tenga una mejor imagen, en general, de la empresa.
- Optimización. Que, al final, es el objetivo de cualquier campaña de marketing. Digamos que la mitad del trabajo, si no más, ya estará hecho, lo que es un muy buen punto de partida.
- Ahorro en costes. No se trata de lanzar campañas a un público general, ni de crear mensajes para todos. Es algo mucho más concreto y específico por lo que los costes son menores. De esta manera, también la toma de decisiones es más sencilla.
Inteligencia artificial
Por supuesto hay que abrir un paréntesis y hablar de la inteligencia artificial porque es lo que ha permitido una verdadera evolución y revolución en lo que al panorama de las bases de datos se refiere.
A día de hoy, no solo podemos emplear diferentes lenguajes de programación que lleven a una mayor eficiencia de nuestra base de datos si no que contamos con lo que se conoce como machine learning mediante el cual se produce un aprendizaje automático de las máquinas que se van adaptando y aprendiendo solas, en función de lo que podamos requerir.
Además, tenemos que pasar a hablar de base de datos NoSQL. SQL sería la base de datos con la que se comenzó, pero todo empezó a volverse más complicado desde que los mismos usuarios, hasta con sus mismos teléfonos móviles, ordenadores o redes sociales, empezaron a poder compartir información.
En ese momento ese escenario comenzó a volverse más y más complejo y es lo que llevaría al Not only SQL como respuesta.
Como cierre, algo básico pero siempre indispensable. No nos podemos olvidar de hacer copias de seguridad de las bases de datos. Un sistema de gestión que no esté protegido y asegurado con copias nos puede llevar a perder muchas horas de trabajo y, por supuesto, dinero.